Microsoft no encuentra evidencia que vincule KB5063878 en Windows 11 24H2 con fallos o pérdida de datos en SSD/HDD

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Microsoft comunicó que su análisis de telemetría y pruebas internas no encontró correlación entre la actualización de seguridad de agosto de 2025 para Windows 11 24H2 (KB5063878) y los reportes de fallos, desaparición temporal de unidades o posible corrupción de datos en SSD y HDD de distintos fabricantes. La compañía mantiene abierto el canal de retroalimentación e insta a los usuarios a remitir registros técnicos detallados para profundizar la investigación.

Reportes iniciales y vínculo sugerido con KB5063878 y KB5062660

Durante las últimas semanas, algunos usuarios y entusiastas relacionaron incidencias en la capa de almacenamiento con el parche KB5063878 y con el preview KB5062660 para Windows 11 24H2. Los síntomas descritos aparecían en cargas de escritura intensiva —como volcado masivo de archivos o instalación de grandes actualizaciones de videojuegos— y se manifestaban como unidades NVMe que dejaban de ser visibles para el sistema. Los informes mencionaban con mayor frecuencia controladores Phison e InnoGrit, con modelos como SanDisk Extreme Pro, Corsair Force MP600, Maxio SSD, KIOXIA EXCERIA PLUS G4 y unidades basadas en Phison PS5012‑E12. Algunos SSD se recuperaban tras reiniciar; otros permanecían inaccesibles.

Postura de Microsoft: telemetría sin anomalías atribuibles al parche

Según la compañía, sus ingenieros no lograron reproducir los fallos en compilaciones actuales, incluso en pruebas realizadas junto a fabricantes de unidades. “Tras una investigación exhaustiva, Microsoft no halló evidencia que relacione la actualización de seguridad de agosto de 2025 con los informes de problemas en discos”, indicó el proveedor. La recogida de datos continuará y se solicita a los afectados aportar registros de eventos, volcados y versiones de firmware.

Pruebas conjuntas y ausencia de degradación reproducible

Microsoft afirma que los ensayos de laboratorio ampliados y el análisis de telemetría no muestran degradación del sistema de archivos, pérdida de datos ni desaparición de discos que pueda atribuirse de forma directa a la instalación de KB5063878 en Windows 11 24H2.

Phison desmiente una “lista de controladores afectados” y recomienda mejorar la refrigeración

Tras la difusión de una supuesta lista de controladores Phison afectados, la empresa negó su autenticidad y anunció posibles acciones legales contra quienes propagaron el documento. Phison informó haber completado más de 4500 horas de pruebas sin reproducir los fallos y sugirió a usuarios bajo cargas sostenidas instalar disipadores en sus SSD para reducir el riesgo de thermal throttling, una práctica habitual para estabilizar el rendimiento de unidades NVMe.

Análisis técnico: factores que pueden provocar caídas bajo I/O intensiva

Escenarios similares suelen estar relacionados con una combinación de factores: thermal throttling por temperaturas elevadas, particularidades del firmware del controlador, agotamiento del SLC cache y aumento de la write amplification en escrituras masivas, límites temporales del protocolo (NVMe command timeouts), y efectos de los estados de ahorro energético APST/ASPM o de la pila de controladores (p. ej., stornvme). Los SSD DRAM‑less suelen ser más sensibles a colas de escritura largas y a I/O fragmentada.

Es relevante recordar que algunas actualizaciones pueden incrementar transitoriamente la actividad de disco (reindexación, escaneo de seguridad, despliegue de parches), lo que puede revelar límites preexistentes de hardware/firmware. Sin reproducción consistente ni correlación en telemetría, no es posible atribuir causalidad directa a un parche concreto. Para referencia técnica, véanse las especificaciones de NVM Express y la documentación de controladores de almacenamiento en Windows.

Recomendaciones para usuarios y equipos de TI

No posponer actualizaciones críticas, pero desplegarlas por fases: grupos piloto, monitoreo de métricas y posterior generalización. Verificar firmware del SSD, controladores de chipset/NVMe y BIOS/UEFI actualizados. Asegurar un flujo de aire adecuado y disipación térmica en chasis y unidades NVMe. Supervisar SMART (sectores reasignados, errores de medios, temperatura) y revisar el Visor de eventos de Windows en busca de advertencias del controlador de almacenamiento.

En sistemas con I/O intensiva, conviene usar disipadores para NVMe, validar copias de seguridad y, durante actualizaciones voluminosas, reducir tareas de escritura concurrentes. Si la incidencia se repite, recolectar registros detallados (eventos de sistema, mini dumps, informes de confiabilidad, versión de firmware) y remitirlos tanto a Microsoft como al fabricante del SSD para su correlación.

Por ahora, ni Microsoft ni los socios de hardware han confirmado un vínculo entre KB5063878 y fallos en unidades. Mantener una disciplina de gestión de parches —despliegue escalonado, observabilidad y buenas prácticas de fiabilidad operativa— reduce el riesgo para la disponibilidad y la integridad de los datos. Actualice de forma responsable y documente, de cara a acelerar diagnósticos y fortalecer la resiliencia de su entorno.

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